No me mientas, el espacio no es dueño de tu mente. Cada una de tus neuronas tiene un propietario que no soy yo. No puedo cambiar esto, pero el tiempo lo hará; cambiaré el gris de tu encéfalo por turquesas, carmesíes, violetas. Seremos uno en el lienzo enfermizo de mi mente, tu serás mi cura y yo seré paciente que no odia, que no se enfada, que espera.
2 comentarios:
pkm hermosamente hablando :D
Gracias gracias por pasar por la pagina.
Publicar un comentario